Por Daniela Cobet
Miembro del Comité Ejecutivo del Nuevo Partido Anticapitalista (NPA) y dirigente de la Corriente Comunista Revolucionaria (CCR) y de la Plataforma 3.

Tras una serie de actos y mítines en las semanas previas, el último domingo se organizaron en las principales ciudades de Francia manifestaciones de solidaridad con los trabajadores y el pueblo griego y en rechazo al chantaje de la Troika. La más grande tuvo lugar en Paris y reunió a unas tres mil personas.

La jornada, convocada por un frente de organizaciones de izquierda y centro-izquierda, se dio en medio de las complejas negociaciones entre las instituciones europeas y el nuevo gobierno griego. En las banderas y cantos se expresaba la oposición al “apriete” de la Troika pero también a los planes de ajuste que se están llevando a cabo en el conjunto del continente.

“En Grecia y en Francia, resistencia contra el ajuste y el capital financiero”, cantaban algunos manifestantes. Otros llevaban pancartas contra la ley “Macron” (nombre del ministro de economía francés) impuesta por el gobierno Hollande que incluye una serie de medidas de ajuste, flexibilización y ataque a los derechos laborales en Francia.

Parte de las organizaciones que participaban a la convocatoria de las manifestaciones expresaron también su apoyo a Syriza – que ven como un modelo para unificar a la centro-izquierda en Francia hacia las elecciones presidenciales del 2017 – y al gobierno Tsipras. “Syriza va a ganar contra el ajuste”, cantaban.

La izquierda anticapitalista también ha marchado, pero bajo sus propias banderas. En particular los miembros del NPA (Nuevo Partido Anticapitalista) participaron con pancartas, banderas y un volante solidario con los trabajadores y el pueblo griego y exigiendo la anulación de la deuda de ese país, en particular de la parte de la que es acreedor el Estado Francés, es decir alrededor de 40 mil millones de euros.

Esto es parte de una campaña votada en los organismos de dirección de ese partido y en la que los militantes de la izquierda del partido (Plataforma 3 del último Congreso) son parte activa. En los próximos días se publicará el nuevo número del periódico L’Anticapitaliste y una serie de afiches y pegatinas que tienen como eje la solidaridad con los trabajadores y el pueblo griego y la exigencia de anulación de la deuda.

En particular la juventud del NPA, que reunió el mismo fin de semana su dirección nacional en la cual la Plataforma 3 es mayoritaria, decidió hacer de esta cuestión uno de los ejes de su actividad y agitación en las próximas semanas, dirigiéndose a las juventudes de otros partidos de izquierda europeas y organizando un acto con la venida de jóvenes militantes del frente anticapitalista griego ANTARSYA.

El internacionalismo y la solidaridad entre los trabajadores y la juventud en Europa son una cuestión clave, ya que los patrones, los gobiernos y la extrema derecha buscan precisamente crear divisiones y chivos expiatorios en el marco de la crisis económica que sacude fuertemente el continente. El último ejemplo de ello es la declaración del ex presidente Nicolas Sarkozy que explicaba que si los griegos no pagaban lo que le debían a Francia, serían los trabajadores franceses los que tendrían que hacerse con la cuenta, haciendo incluso el cálculo de que eso le costaría 700 euros a cada uno.

Sin embargo, lo esencial de la deuda griega (incluida la parte que tiene con el Estado francés) corresponde al salvataje de los bancos europeos y tal dinero jamás ha servido para responder a las necesidades de los trabajadores y del pueblo griego. Hace solo unos pocos meses el gobierno Hollande le ha regalado un monto casi equivalente a la parte que tiene de la deuda griega a la patronal bajo la forma de exoneraciones fiscales en lo que se ha llamado el “pacto de responsabilidad”.

Por eso a Sarkozy, a Hollande y a todos los políticos burgueses les seguiremos contestando en las calles que la crisis y la deuda no nos toca a los trabajadores pagarla, ni en Grecia ni en Francia, sino a los capitalistas y a los bancos que fueron los que la generaron.

Fotografías: Rouge Milo