Jueves 16 de mayo, la sala de la Librairie Résistances, en el distrito XVII°, no fue suficiente para albergar a todo el mundo y los camaradas tuvieron que asistir al debate retransmitido en la sala contigua. En los dos casos, el entusiasmo no faltó a la cita, con un público militante, estudiantil, de trabajadores y trabajadoras, destacándose sobre todo la presencia de camaradas huelguistas de PSA Aulnay adonde Raúl Godoy había ido el lunes 13, a su asamblea de la mañana. Recién llegado de una gira por el Estado español y Cataluña, a la que fue invitado por la izquierda sindical, Raúl Godoy se detuvo en los momentos clave de la lucha de Zanon y, más extensamente, en los desafíos que se plantean a la clase obrera cuando decide oponerse a los dictados de la patronal y sus aliados: los gobiernos, la justicia y la policía.

Así pudimos seguir el combate de los trabajadores de Zanon desde hace más de diez años, primero en su preparación contra los planes de despidos y cierre, a fines de los años 1990 y comienzos de 2000, luego la manera que eligieron de ocupar y relanzar la producción de revestimientos cerámicos y baldosas bajo su propio control. Raúl Godoy también se explayó sobre la manera en que se ubicó la lucha, de entrada, en el terreno de la defensa de la fábrica, contra el cierre del establecimiento, pero también en un marco más amplio: la solidaridad con las otras “fábricas recuperadas”, sea cual fuera la forma legal que adoptaran (cooperativa o no), con los otros sectores en lucha y movilizados, a través de la construcción sistemática de herramientas de coordinación. Esto es lo que permitió, sobre todo, construir un vasto movimiento de solidaridad y llamar, cuando fue necesario, a una huelga general provincial cuando la fábrica estaba amenazada con una orden de desalojo. En el curso del debate y el intercambio, pudimos descubrir cómo los trabajadores de Zanon supieron construir, en los hechos, la hegemonía obrera, es decir, una sólida alianza alrededor de su lucha, con los trabajadores desocupados, los piqueteros, el movimiento estudiantil, con los sin techo o los trabajadores de la salud y la educación, sin olvidar a los sectores más marginados del proletariado, las empleadas domésticas, el proletariado inmigrante, e incluso los trabajadores que están privados de su libertad y se encuentran detrás de los barrotes de las cárceles del Estado capitalista.

Todo esto es lo que ha constituido y sigue constituyendo la especificidad del combate de los obreros ceramistas de Neuquén. Esto es lo que marca su fuerza política, que hoy defienden en el parlamento provincial en donde han ganado una banca “obrera y socialista”, ocupada de manera rotativa por un-a trabajador-a (hoy, por Raúl Godoy). El conjunto de estos elementos es lo que explica también por qué los ceramistas de Neuquén siempre han integrado su combate en un marco internacionalista militante, que les ha servido en el momento en el que más lo necesitaban, y que hoy continúan a través de la gira de Raúl Godoy por Europa, en Francia, el Estado español, Alemania y Grecia.

Por supuesto, todo esto suscitó un intercambio muy rico en el que tomaron la palabra varios camaradas, militantes políticos y sindicales, como ex huelguistas del ENS de Paris o militantes de la huelga de PSA. Durante el debate y la discusión, todo el mundo tenía en mente la situación europea y francesa, que no es la de la Argentina de la crisis de comienzos de los años 2000, pero en la que la alternativa “quién paga la crisis: nosotros o ellos”, es la misma. Al final de la reunión, antes de compartir una copa y continuar el debate con los camaradas que todavía tenían mil preguntas para hacer o debatir, toda la sala se levantó y cantó el himno internacional de los trabajadores.

Pero para aquellos y aquellas que no pudieron estar presentes el 16, queda aún el foro que Raúl Godoy realizará en la Fête de Lutte Ouvrière, el domingo 19 de mayo, a las 13 hs, en la Cité du Roman. El debate no hace más que comenzar…

17/05/13