WEB   |   FACEBOOK   |   TVPTS

 
Cochabamba: impulsar la más amplia movilización obrera, campesina y popular
por : LOR-CI, Bolivia

10 Jan 2007 | declaración de la LOR-CI

El anuncio del prefecto de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, ex socio del masacrador Goñi, de convocar unilateralmente a un nuevo referéndum departamental por la autonomía, se ha convertido en una clara provocación contra los movimientos sociales, reabriendo la crisis nacional con epicentro en Cochabamba que había quedado en estado latente luego del cabildo de la medialuna, al que este prefecto adhirió.

La quema de la prefectura, la brutal represión, el amague de amotinamiento de la policía, que hizo retroceder al gobierno en la destitución del comandante departamental, y la creciente polarización política que se manifiesta en los bloqueos de caminos y movilizaciones de campesinos y regantes, junto a los reaccionarias movilizaciones del comité cívico de Cochabamba y su llamado a un paro cívico indefinido, amenazan extender a nivel nacional estos enfrentamientos. Esta crisis tiene como telón de fondo el empantanamiento, que ha puesto al borde del fracaso a la Constituyente, tal como lo insinuaron Evo Morales y Roman Loayza, pese a sus desesperados intentos de lograr algún tipo de consenso con los representantes de los partidos tradicionales, lo que podría llevar, como reconoció el senador de PODEMOS Carlos Börth, a un estallido de movimientos sociales de consecuencias impredecibles.

El fracaso de la política de “consensos”

¿Cómo fue que los partidos tradicionales que estaban destruidos y que no tenían ningún apoyo social, luego de los levantamientos de octubre y junio han llegado a tanto?
El MAS facilitó el envalentonamiento de la derecha con su política de conciliación permanente. Primero, pactando el referéndum autonómico en el 2005, que intentaba desvirtuar la movilización obrera- campesina -popular de junio, y que le daba garantías a la clase dominante, y en particular a la burguesía cruceña, para que pudiera avanzar con un instrumento político-legal, su proyecto autonomista, que hoy utiliza para pasar a la ofensiva. Posteriormente, el gobierno pactó una ley de convocatoria a la asamblea constituyente que garantizaba la sobrevida de los partidos tradicionales, que excluía la participación de importantes sectores de los trabajadores, campesinos y pueblos originarios, y finalmente le otorgaba a la burguesía un candado con los dos tercios para aprobar el texto de la Constitución. Estas concesiones políticas vinieron acompañadas de medidas económicas que bajo un discurso nacionalista, garantizan la propiedad y los intereses fundamentales de las transnacionales y los grandes propietarios, como los contratos petroleros o la modificación de la Ley INRA que preserva la gran propiedad rural y posterga las demandas campesinas de una real e inmediata reforma agraria.

Al mismo tiempo que otorgaba concesiones y garantías a la burguesía, a los Cívicos y a los partidos tradicionales, el MAS recreaba ilusiones en el movimiento campesino y sectores populares con algunas tibias concesiones formales y retórica antiimperialista, descolonizadora y democrática, buscando contener al movimiento de masas. Fue en este marco que reprimió a sectores de vanguardia, como al movimiento sin tierra en Oruro y los cocaleros en yungas de Vandiola e impulsó en Huanuni, a través de los cooperativistas, una salvaje ofensiva contra los mineros asalariados que fue derrotada por estos últimos, defendiendo así la nacionalización de la empresa.
El conjunto de la política aplicada por el gobierno de Evo Morales, intentando buscar un pacto con la burguesía y desmovilizar a las masas, ha llevado a esta situación, donde la reacción burguesa y proimerialista levanta cabeza y pasa a la ofensiva. Lamentablemente, la COB y la mayoría de las direcciones sindicales vienen apoyando la política de conciliación del MAS, se han negado a impulsar la intervención independiente de los trabajadores y el pueblo, con sus propios métodos de acción, en la crisis política.

Sin embargo, sólo la movilización general de los trabajadores, campesinos, pueblos originarios y sectores populares, sin depositar ninguna confianza en el gobierno y sus permanentes llamados a la calma para negociar con los cívicos, los prefectos y los partidos de la derecha, puede derrotar esa ofensiva reaccionaria.

¡Aplastar la ofensiva reaccionaria extendiendo la movilización!

¡Abajo Reyes Villa! Viva la movilización de los campesinos, trabajadores, y del pueblo pobre cochabambino contra sus maniobras y ataques al servicio de la reacción! Frente a los intentos de generalizar la ofensiva reaccionaria, anunciada con la reunión de todos los prefectos y Cívicos autonomistas, para preparar cabildos y paros cívicos, es necesario extender esta movilización al oriente y al occidente de la nación, enfrentando las provocaciones de los comités cívicos y los prefectos. Hay que recuperar la experiencia de autoorganización democrática para la lucha que permitió vencer en la guerra del agua del 2000, poniendo en pie ya una verdadera coordinadora o asamblea obrera y popular departamental, con delegados de base y con mandato de sus asambleas de todos los sectores, regantes, cocaleros, fabriles, estudiantes, juntas vecinales, etc., para preparar la huelga general política en el departamento, con movilización y bloqueo de caminos, empezando por derrotar a Reyes Villa, imponer el conjunto de las demandas del pueblo cochabambino, e iniciar la contraofensiva obrera , campesina y popular a nivel nacional.

Para enfrentar las provocaciones policiales, de los comités cívicos y los prefectos, será necesario impulsar la formación de comités de autodefensa que garanticen la seguridad de los trabajadores y el pueblo movilizado.
Los socialistas revolucionarios no creemos que la actual Constituyente pueda responder a las expectativas populares ni resolver ninguno de los grandes problemas nacionales, pero llamamos a los trabajadores y campesinos a defender con la acción sus elementales derechos democráticos contra la conspiración de los cívicos, los partidos tradicionales y los prefectos, así como imponer sus legítimas e impostergables demandas: nacionalización de los recursos naturales y empresas capitalizadas, tierra y territorio, trabajo y salario digno, salud y educación, etc.
En este camino, es urgente imponer que la COB, CODes, y CORes, que hasta ahora, apoyando al gobierno, se han negado a impulsar la intervención independiente de los trabajadores y el pueblo, rompan con la política de conciliación masista, y convoquen inmediatamente a un gran encuentro campesino- obrero y popular con delegados revocables y elegidos en asamblea para discutir como aplastar la ofensiva burguesa y para imponer el conjunto de las demandas obreras y populares.

LOR-CI

10-01-2007


LEA TAMBIEN:

Crónica desde Bolivia:
Ofensiva reaccionaria amenaza hundir la asamblea constituyente y genera una creciente espiral de violencia

 

Suscríbase a nuestra gacetilla electrónica
Online | www.ft-ci.org


Organizaciones de la FT-CI
La Fracción Trotskista-Cuarta Internacional está conformada por el PTS (Partido de los Trabajadores Socialistas) de Argentina, el MTS (Movimiento de Trabajadores Socialistas) de México, la LOR-CI (Liga Obrera Revolucionaria por la Cuarta Internacional) de Bolivia, MRT (Movimento Revolucionário de Trabalhadores) de Brasil, PTR-CcC (Partido de Trabajadores Revolucionarios) de Chile, LTS (Liga de Trabajadores por el Socialismo) de Venezuela, LRS (Liga de la Revolución Socialista) de Costa Rica, militantes de la FT en Uruguay, Clase Contra Clase del Estado Español, Grupo RIO, de Alemania y Militantes de la FT en la CCR/Plataforma 3 del NPA de Francia.

Para contactarse con nosotros, hágalo a: [email protected]