¡Hay que preparar un verdadero plan de lucha
por el salario, el trabajo y para que la crisis la paguen los ricos!

El paro de 48 horas decretado por el último ampliado de la COB sin consultar a los trabajadores de base, no sólo que fue débil, ya que sólo algunos sectores de la Caja Nacional de Salud y del magisterio paralizaron actividades en forma desigual, sino que en la marcha y en algunas asambleas se expresó malestar y bronca frente al rol oficialista del secretario general de la central obrera Pedro Montes y la burocracia. El lunes 21 de marzo, la concentración convocada por el CE de la COB en la zona de Senkata en la periferia de la ciudad de El Alto empezó a las 6 hs. de la mañana, para iniciar la movilización hacia la sede de gobierno a las 8 hs. La convocatoria de la COB buscó coincidir con la marcha institucional programada por el sistema universitario nacional y que logró aglutinar a decenas de miles de estudiantes de todo el país que exigían el respeto a la autonomía universitaria ante el intento del gobierno de fusionar los fondos del seguro social universitario con los de la Caja Nacional de Salud (ver declaración aparte). Esta operación buscaba disimular la debilidad con que la COB había convocado al paro. De los casi 40 sectores afiliados a la COB sólo 8 se plegaron a la medida, varios de los cuales mantienen fuertes críticas a Montes y todo el Comité Ejecutivo como son el magisterio de La Paz que garantizó un paro parcial, y fabriles de La Paz que se movilizaron con sus respectivas directivas sindicales. El distrito minero de Huanuni con sus 5.000 trabajadores, rechazó el paro en una asamblea por considerarlo “a destiempo” e “inconsulto”. Al iniciarse la concentración sectores de la universidad impidieron que sea el Comité Ejecutivo de la COB quienes marchen a la cabeza obligando a que la central esperara que avancen decenas de miles de estudiantes para poder marchar. La situación de crisis y división en las filas de la COB, es la expresión de que importantes sectores de la burocracia están percibiendo el cambio de estado de ánimo de sus propias bases con respecto al gobierno del MAS, e intentan tomar distancia del mismo, pues el Congreso de la COB está previsto para 1° de mayo y allí se jugarán los cargos. Así el CE de la COB que se comportó como una oficina más del gobierno durante los últimos años, hoy intenta reubicarse con una pose combativa, mientras el PCB que dirige el magisterio nacional intenta mantener un pie en el plato de la creciente oposición sindical sin sacar el otro del gobierno, cuestión que se reflejó en comunicados que mantenían la disciplina sindical y el llamado al paro de la COB, pero otorgando libertad de acción a las respectivas federaciones.

El gobierno

Frente a este creciente escenario de desgaste que el gobierno viene sufriendo desde el fallido gasolinazo en el mes de diciembre, a causa de la creciente subida de precios, intenta frenar la demanda de los trabajadores de recomposición salarial con el argumento de que eso traería inflación, de ahí que sólo hayan otorgado el 10% para cuatro sectores del Estado y como punto de referencia para la empresa privada, así como los anuncios de reevaluaciones del boliviano con el retiro de 5.000 millones de pesos de circulación. Frente al paro decretado por la COB, que fue parcial, lejos de tener una actitud cuidadosa, los ministros de trabajo y de comunicaciones salieron a “festejar” la división en la COB y que el paro no haya tenido pleno acatamiento en el mismo tono y con las mismas palabras que lo hacían los gobiernos anteriores, no percibiendo que si el paro no fue contundente no es por afinidad con el gobierno o aceptación de su irrisoria oferta salarial sino por el rechazo profundo de que es objeto la burocracia sindical “oficialista” de Montes y sus amigos. Al mismo tiempo tanto Evo como los ministros de educación y salud, al ver la magnitud de la protesta universitaria, anunciaron que la fusión del seguro universitario con los fondos de la CNS solo se realizaría de forma voluntaria, percibiendo que un peligroso y nuevo frente de batalla podría abrirse a nivel nacional.

La intersindical: un proyecto que merece ponerse en pie

La federación del magisterio de la Paz ha propuesto construir una intersindical para pelear al interior de la COB, sin embargo hasta el momento poco y nada se ha hecho para ponerla en pie. Desde la LOR-CI hemos sostenido que la intersindical debe adoptar un programa de acción que permitirá en primer lugar unificar a los distintos sectores que vienen peleando aislados como los mineros de la Chojlla, las fábricas que pelean por sus salarios atrasados o por sus sindicatos, como en El Alto, Oruro y Cochabamba. Esta intersindical para poder avanzar tendrá que combatir a la burocracia sindical apuntando al próximo congreso de la COB, a las patronales privadas que súper explotan a los compañeros fabriles y de servicios y finalmente ubicarse en forma independiente del gobierno que actúa como garante de los negocios empresariales. Hoy, luego de 5 años de gobierno del MAS los grandes beneficiarios de la “paz social” conquistada por Evo, García Linera y sus amigos han sido las patronales mineras, fabriles, la nueva burguesía “burocrática” que hace grandes negocios con el Estado y la burguesía importadora que hace grandes negocios con el tipo de cambio de dólar barato. Ante este escenario, hay que poner en pie una genuina intersindical con un programa que apunte a atacar los intereses patronales, de los ricos, de los empresarios y banqueros y no simplemente una intersindical que sólo luche por el salario. Pero para definir este programa por el que pelearemos los revolucionarios desde las empresas en que nos encontramos, hace falta la más plena y democrática participación de los trabajadores de base eligiendo delegados por fábricas, empresas, escuelas y hospitales. Llamamos a los compañeros de la Federación departamental de magisterio, a los compañeros de CASEGURAL, del STUMSA, de la caja petrolera, y a los sindicatos fabriles combativos y en conflicto a poner manos a la obra en esta vital tarea para unir en la lucha a los trabajadores.

Por Liga Obrera Revolucionaria – Cuarta Internacional (LOR-CI) de Bolivia